15 El Diablo.
El diablo: es el arquetipo de todo lo que consideramos malo,
vil y obscuro. Sin embargo por lo general hace referencia a un estado mental
del consultante en el cual pueda ser que se sienta impulsado a hacer cosas por
razones equivocada.
El diablo representa la obscuridad la obsesión, la mentira y
los deseos sexuales desmedidos. Las figuras humanas en el arcano representan
nuestra propia humanidad siendo esclavizada por nuestra parte animal, la cual está
compuesta por deseos insanos, por la ambición, la lujuria y el desenfreno.
Vale la pena mencionar que desde un punto de vista más
filosófico el Diablo en si es la manifestación de esa parte dentro de nosotros
que tanto puede frenarnos como también impulsarnos a mejorar. Bien es sabido que aquel que se vence a si
mismo se convierte en un súper hombre, ya que el enemigo más grande y el
demonio más escalofriante capaz de boicotearnos como ningún otro somos nosotros
mismos.
15 El Diablo.
Derecho: Puede significar que tenemos una relación en la
cual confundimos la lujuria con el amor. Puede también advertirnos de estar
siendo demasiado ambiciosos he irónicamente, y aunque parezca contradictorio,
en esta dirección el arcano puede revelar que el consultante aún siente algo de
culpa, sin embargo, sus bajas pasiones logran dominarlo llevándolo a cometer
atrocidades para conseguir lo que desea. Puede incluso hacer alusión a
adicciones por ejemplo.
Revés: Igual que de derecho la única diferencia es que de
revés la conciencia definitivamente ya salido de escena y el consultante gira
como un carrusel sin control a punto de descarrilarse por completo y provocar
un desastre. La depresión y el desenfreno ahora son un estilo de vida y a menos
que el consultante tome medidas drásticas en su comportamiento y/o pida ayuda,
difícilmente habrá un final feliz.
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